Por Agroempresario.com

El raigrás Rápido INTA es una opción estratégica para la alimentación del ganado en las zonas ganaderas pampeanas y extrapampeanas de la Argentina. Esta variedad, desarrollada por un equipo del INTA de Concepción del Uruguay y Pergamino, se caracteriza por su capacidad de producir una gran cantidad de forraje en un corto período de tiempo, lo que la convierte en una solución ideal en regiones con bajas tasas de crecimiento de pasturas perennes durante el invierno.

Este raigrás es una variedad anual diploide, lo que le otorga mayor rusticidad y resistencia tanto a condiciones adversas como al pastoreo intensivo. Para su desarrollo, los investigadores trabajaron con más de 20 poblaciones naturalizadas de raigrás, un proceso de mejoramiento genético que permitió obtener una variedad que destaca por su rápido crecimiento, excelente aptitud forrajera y alta productividad en un corto ciclo.

Alejo Re, especialista del INTA Concepción del Uruguay y co-obtentor de la variedad, destacó que Rápido INTA es un cultivo que se adapta muy bien a las condiciones climáticas y de humedad del sur de Buenos Aires, Entre Ríos y hasta Brasil. “Es una especie ideal para alimentar al ganado en zonas con periodos de baja disponibilidad de pasto”, explicó.

El proceso de mejoramiento genético de esta variedad incluyó la selección de genotipos tempranos y tardíos, con el objetivo de obtener una población que tuviera un buen rendimiento y resistencia. Mariela Acuña, investigadora de INTA Pergamino y también co-obtentora de la variedad, detalló que después de varios ciclos de selección, se lograron dos poblaciones experimentales: una temprana y una tardía, las cuales se evaluaron hasta llegar a la variedad definitiva, Rápido INTA.

Este raigrás no solo es beneficioso en campos ganaderos, sino también en plantaciones mixtas, ya que facilita la rotación de cultivos y permite sembrar soja de segunda o maíz en lotes desocupados más rápidamente. Re subrayó que el ciclo de crecimiento corto del Rápido INTA lo convierte en un cultivo ideal para las ventanas agrícolas, un periodo reducido de tiempo en el que puede generar forraje en abundancia. “El material se destaca por la rapidez de su crecimiento, pudiendo obtener entre dos y tres cortes en un ciclo”, agregó.

Por su parte, Horacio Vouilloud, productor agropecuario de Entre Ríos que multiplica semillas de raigrás en los lotes de ensayo del INTA, explicó que la variedad se caracteriza por ser un diploide corto, ideal para la región. “Nos permite comenzar el pastoreo antes, incluso después de un verano muy seco. Es un material que no solo crece rápido, sino que se resiembra de manera natural, lo que facilita su manejo”, dijo.

Vouilloud, quien lleva tres años sembrando esta variedad, destacó que su comportamiento ha sido excelente incluso en condiciones de escasez de agua, lo que confirma la resistencia y adaptabilidad de este material. “Es muy demandado en el mercado, especialmente por aquellos que buscan un cultivo de forraje que se desarrolle rápidamente”, comentó.

El impacto de Rápido INTA no solo se limita a Argentina, sino que también ha penetrado en el mercado brasileño, especialmente en el norte de Entre Ríos y sur de Corrientes, donde el invierno es más corto. Re mencionó que “la demanda de materiales como Rápido INTA, que concentran la producción en un corto periodo de tiempo, sigue creciendo, y este cultivo se posiciona como una excelente opción para enfrentar las limitaciones climáticas de las zonas más restrictivas”.