Por Agroempresario.com
El economista y expresidente del Banco Nación, Carlos Melconian, analizó la política económica del Gobierno y destacó la disciplina fiscal del presidente Javier Milei. Sin embargo, advirtió sobre los desafíos que plantea la dinámica del tipo de cambio y el impacto que la apreciación del peso podría tener en la competitividad del país.
En una entrevista con Urbana Play, Melconian reconoció que el superávit fiscal es un pilar fundamental, pero insuficiente para sostener el esquema económico. "El equilibrio fiscal es un dato relevante, pero no es lo único. La convergencia entre el valor real del tipo de cambio y las necesidades del sector productivo avanzan a ritmos diferentes", explicó.
El economista recordó que Argentina recibió un "dólar atrasado" y un Banco Central con reservas negativas, lo que ha generado un debate sobre la necesidad o no de una devaluación. "Hay sectores ineficientes y anticompetitivos que piden una devaluación, pero yo no pertenezco al club devaluacionista ni al de la apreciación cambiaria", sostuvo. En este sentido, instó a encontrar un balance entre política fiscal y cambiaria para evitar distorsiones en la economía.
Uno de los puntos en los que Melconian puso énfasis fue la administración del cepo cambiario y la acumulación de reservas. "El Gobierno actuó con pragmatismo y no cayó en la idea de liberalizar el mercado cambiario de inmediato. La situación requería cautela, porque cuando tenés la papa caliente, se te frunce un poco el o…", expresó de manera gráfica, resaltando el riesgo de una apertura abrupta del mercado de cambios.
El economista también analizó las proyecciones de ingreso de divisas por exportaciones de energía, minería y agroindustria, aunque advirtió que el superávit fiscal no debe ser el único sostén de la estrategia económica. "No podemos recostarnos solo en el equilibrio fiscal y esperar que la llegada de dólares por Vaca Muerta resuelva todo. Hay que evitar errores del pasado", subrayó.
Melconian insistió en que la estabilidad cambiaria y la acumulación de reservas son factores clave para evitar una crisis. "No hay país en el mundo que no necesite reservas. Brasil, con todas sus dotaciones de dólares y sin deuda en moneda extranjera, ha tenido devaluaciones. Esto demuestra que el déficit fiscal y cuasi fiscal pueden generar tensiones cambiarias incluso en economías con fuerte respaldo de reservas", explicó.
Asimismo, enfatizó que encontrar un equilibrio entre la estabilidad macroeconómica y la política monetaria será esencial para sostener el proceso de desinflación. "El Gobierno apuesta a consolidar la confianza y la demanda de pesos, porque este no es un programa dolarizador, sino uno donde la recuperación del peso es la clave del éxito", puntualizó.
Melconian destacó que la recuperación de la demanda de pesos será un factor determinante en la evolución de la inflación y la credibilidad de la política económica. "El objetivo es lograr que el peso vuelva a ser una moneda de confianza. El éxito del programa económico dependerá de esto", afirmó.
Finalmente, instó a evitar debates polarizados y a centrarse en resolver los desafíos estructurales de la economía. "El Gobierno tiene convicción fiscal, lo cual es un activo invaluable. Pero también hay que complementarlo con una estrategia cambiaria coherente. No podemos caer en la discusión Boca-River y perder de vista los verdaderos problemas", concluyó Melconian.