Amcham ve oportunidades para incrementar el comercio entre EE. UU. y Argentina en sectores clave

Por Agroempresario.com

La Cámara de Comercio de Estados Unidos en la Argentina (AmCham) destacó diversas oportunidades para fortalecer el comercio bilateral entre ambos países. Según un informe reciente, la Argentina tiene un alto potencial para aumentar las exportaciones a EE. UU. en sectores como biodiésel, carne bovina, miel, aceites esenciales y vinos. Sin embargo, para aprovechar estas oportunidades, es crucial avanzar en la reducción de barreras comerciales, consolidar acuerdos estratégicos y mejorar el clima de negocios en la Argentina.

AmCham también señaló que la Argentina posee serias posibilidades de acceder a un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, lo que abriría nuevas puertas para incrementar el intercambio comercial. La entidad considera que, de concretarse un acuerdo, sectores como la agroindustria, la energía, los minerales críticos y la tecnología, incluyendo la expansión del 5G y WiFi 6, se benefician enormemente.

El informe también hace hincapié en el impacto de las políticas arancelarias implementadas por la administración de Donald Trump. En particular, los aranceles de hasta el 25% impuestos sobre diversos productos representan una amenaza a corto plazo para las exportaciones argentinas. Aunque hasta ahora el comercio bilateral no ha sido significativamente afectado, AmCham advierte que estas medidas podrían poner en riesgo las oportunidades de crecimiento de las industrias argentinas en EE. UU.

Desde 2015 hasta 2023, la Argentina registró un déficit comercial promedio de aproximadamente US$2700 millones anuales con Estados Unidos. Sin embargo, en 2024, logró un superávit de US$302 millones, gracias a una caída en las importaciones y un leve crecimiento en las exportaciones. Argentina exporta productos como oil & gas, metales primarios y alimentos procesados hacia EE. UU., mientras que compra productos como químicos, electrónicos, maquinaria y derivados del petróleo.

El informe también destaca la importancia de los acuerdos que actualmente rigen la relación comercial entre ambos países. Uno de los más relevantes es el Acuerdo Marco de Comercio e Inversión (TIFA), firmado en 2016, y el Memorando de Entendimiento sobre minerales críticos, suscrito en 2024. Estos acuerdos son clave para consolidar la cooperación económica y facilitar la expansión del comercio.

AmCham identificó varias oportunidades de crecimiento para las exportaciones argentinas. Entre ellas, destaca la posibilidad de revisar los aranceles al biodiésel. Una reducción de estos impuestos podría reactivar exportaciones valuadas en más de US$1200 millones anuales. Además, la reincorporación de la Argentina al Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) facilitaría el acceso a mercados clave, y la expansión de las exportaciones agroindustriales también tendría un impacto positivo en la balanza comercial.

No obstante, la cámara advirtió sobre los desafíos que enfrenta Argentina para mejorar su competitividad en el mercado estadounidense. La alta presión impositiva, las restricciones cambiarias y la falta de infraestructura logística adecuada son algunos de los factores que limitan las oportunidades de crecimiento. Además, la necesidad de mayor seguridad jurídica y estabilidad macroeconómica son condiciones fundamentales para atraer inversiones extranjeras y fortalecer el comercio bilateral.

Finalmente, AmCham concluyó que la relación comercial entre Argentina y Estados Unidos es sólida y que existen amplias oportunidades de crecimiento. Para potenciar este vínculo, es fundamental avanzar en la reducción de barreras comerciales, fortalecer los acuerdos estratégicos y mejorar el clima de negocios en la Argentina. La estabilidad macroeconómica y una mayor seguridad jurídica serán determinantes para atraer inversiones y fomentar el comercio bilateral.

En febrero, AmCham señaló que la Argentina tiene una alta probabilidad de acceder a un TLC con EE. UU., un acuerdo que podría estar en el horizonte cercano, especialmente si se considera la rapidez con la que se llevó a cabo el Tratado de Libre Comercio entre EE. UU. y Corea del Sur.