Por Agroempresario.com
Tras la reciente volatilidad cambiaria, el Gobierno confía en que el mercado encontrará un equilibrio en las próximas semanas. Con la llegada de dólares provenientes del desembolso del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la liquidación de la cosecha gruesa, el equipo económico proyecta un segundo trimestre con mayor estabilidad y acumulación de reservas para el Banco Central de la República Argentina (BCRA).
El respaldo del FMI, que busca fortalecer las reservas, se suma al flujo estacional de divisas que generan las exportaciones agrícolas. Este ingreso de dólares es clave para evitar mayores presiones sobre el tipo de cambio y sostener el proceso de desinflación que el Gobierno pretende consolidar. El presidente Javier Milei ha expresado que la meta es llevar la inflación por debajo del 2% mensual en el corto plazo.
En los últimos días, el mercado cambiario mostró signos de ajuste, con un reacomodamiento del dólar contado con liquidación cerca de los $1.300. Esta cotización más atractiva podría incentivar la liquidación de divisas por parte de los exportadores en las próximas semanas. Además, la reducción temporal de retenciones hasta junio representa un incentivo adicional para el sector agrícola.
El BCRA, que recientemente debió intervenir en el mercado con ventas netas de USD 930 millones en cuatro días, busca revertir esta tendencia. La expectativa es que, con la llegada de dólares del agro y del FMI, el saldo en el mercado cambiario vuelva a ser positivo para mediados o fines de abril.
Por otro lado, el contexto internacional también ha jugado a favor de la estabilidad local. La Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) anunció que reducirá el ritmo de retiro de dólares del mercado, lo que trajo alivio a los mercados financieros. Esta decisión fortaleció las cotizaciones de bonos y acciones argentinas, en especial los papeles bancarios, que recuperaron gran parte del terreno perdido en jornadas anteriores.
En el ámbito político, la aprobación del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte de la Cámara de Diputados brindó un marco legal al acuerdo con el FMI, disipando incertidumbre sobre el respaldo legislativo a las negociaciones. Aunque aún no se conocen detalles precisos sobre los montos y condiciones del acuerdo, el aval del Congreso fue recibido positivamente por los mercados.
El Gobierno apuesta a que este escenario de mayor ingreso de divisas contribuya a la estabilidad macroeconómica y a la recuperación de la confianza en el peso. De consolidarse la acumulación de reservas y la moderación inflacionaria, las condiciones estarían dadas para una mayor previsibilidad en el frente cambiario y financiero en el segundo semestre del año.