Por Agroempresario.com
Ignacio Kovarsky, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), expresó su preocupación por la “voracidad fiscal” que exhiben los intendentes de la región, señalando que aún no comprenden que el Estado debe ser más eficiente y repensar sus funciones esenciales. En un contexto de incertidumbre económica, Kovarsky también subrayó la importancia de contar con reglas claras para el sector agrícola y su producción.
En una reciente intervención en el programa Chacra Agro Continental, el dirigente de CARBAP criticó duramente a los gobiernos locales por lo que considera un afán excesivo por aumentar la carga fiscal. “La voracidad fiscal que tienen los intendentes es increíble”, dijo, apuntando a las políticas tributarias que afectan la competitividad del sector agropecuario. Kovarsky resaltó que el Estado debe centrarse en ser eficiente, en lugar de gravar excesivamente a los productores.
En cuanto a la producción agrícola, Kovarsky reafirmó su postura de defensa de la libertad de los productores para tomar decisiones sin presiones políticas. “La producción del campo no es un bien público, no es opinable, no es confiscable. Así como el ferretero tiene sus tornillos, nosotros tenemos nuestros granos”, afirmó, remarcando la importancia de que el sector mantenga autonomía para operar según sus necesidades y proyecciones económicas.
El presidente de CARBAP también abordó el tema de las retenciones, especialmente en lo que respecta a la siembra de granos finos como el trigo y la cebada. En ese sentido, expresó su preocupación por el posible regreso de las retenciones a partir del 30 de junio, siguiendo las declaraciones del presidente de la Nación, quien recomendó a los productores liquidar sus exportaciones antes de esa fecha.
Kovarsky destacó que, aunque se habían logrado avances con la reducción de las retenciones, esperaba que este beneficio se mantuviera tras junio y que, incluso, el gobierno contemplara una “baja progresiva” hacia la eliminación total de los derechos de exportación. Según su visión, esto permitiría al sector agrícola seguir creciendo y fortaleciendo la economía nacional.
Concluyó su intervención señalando que, en el momento en que los gobiernos comprendan que es necesario permitir que el sector privado se desarrolle e invierta sin tantas restricciones, Argentina alcanzará su verdadero potencial económico.