Mariano Bosch, fundador y CEO de Adecoagro, asumió la presidencia del 61° Coloquio de IDEA en un momento signado por alta volatilidad económica. En diálogo con Agustín Jamele para Forbes Argentina, destaca que aunque “los momentos de inestabilidad no son buenos”, están habituados a esas fluctuaciones, lo que permite mantener una mirada centrada y estratégica.
Para Bosch, el primer paso para retomar crecimiento sostenible es lograr una estabilidad macroeconómica creíble, condición necesaria para que las empresas puedan planificar inversiones, mejorar procesos productivos e innovar. Sin ese marco, sostiene, no es viable abordar reformas estructurales más profundas.
Una constante en su discurso es el énfasis en la productividad como eje central del futuro argentino. Bosch recuerda que, en los últimos 15 años, la productividad por trabajador ha caído, algo que “no nos puede pasar”, según afirmó en la entrevista.
Desde su óptica, el desafío del empresariado no es sólo sostener o crecer, sino hacerlo con mayor eficiencia, innovación y calidad. En ese sentido, advierte que muchas compañías locales están atrasadas tecnológicamente, y que el potencial de otras más avanzadas queda incompleto si no se alinean todas con esa cultura transformadora.
Bosch plantea que sin estabilidad no tiene sentido hablar de mejoras impositivas, de logística ni de costos: “sin estabilidad macroeconómica no da para conversar de ninguna de esas cosas”.
A pesar del panorama incierto, Bosch mantiene una visión optimista. Identifica ventajas comparativas claras para Argentina: recursos naturales, agro, energía renovable, minería, turismo, y talento humano distribuido más allá de los grandes centros urbanos.
Señala que no alcanza con poseer recursos; la clave está en agregar valor, promover tecnologías y conectar esos activos con mercados exigentes. Su convicción es que Argentina tiene potencial para posicionarse como proveedor global sostenible, capaz de exportar más que commodities.
Dentro del rol que le cabe al sector privado, Bosch insiste en que los empresarios deben liderar la transformación, no depender exclusivamente de políticas públicas. “El rol empresario es fundamental”, resume, exigiendo mayor foco en la productividad, innovación y calidad.
Para Bosch, el 61° Coloquio de IDEA será una plataforma de diálogo esencial entre empresarios, gobierno y otros actores para diseñar un rumbo compartido hacia una Argentina más competitiva. En su apertura del evento sostuvo que “tenemos que saber en qué cancha estamos jugando” y reclamó reglas claras, previsibilidad y colaboración.
Reconoce que no es imprescindible que las reformas lleguen todas de golpe, sino que la certidumbre se instale. En ese camino, el coloquio puede funcionar como hoja de ruta para el debate de temas estructurales como impuestos, institucionalidad, empleo e innovación.
Con esta nueva estructura y estilo, se presenta una visión renovada del pensamiento de Mariano Bosch —transmite sus convicciones, prioridades y proyección de una Argentina que puede ser competitiva si logra estabilidad, innovación y productividad.