Europa se prepara para un descenso en la cosecha de cereales

La Unión Europea (UE) lanzó un alerta por la reducción en la producción de trigo y otros cereales. La cosecha en 2022 se ve afectada por la sequía registrada esta temporada en muchas zonas de producción. La ONU teme por la inseguridad alimentaria a nivel mundial. 

En medio de una histórica ola de calor en el "viejo continente", la Comisión Europea advirtió que casi la mitad del territorio de la UE está en riesgo de sufrir sequía tras una falta de precipitaciones prolongada. "Un 11% está en nivel de alerta, con la vegetación y los cultivos debilitados por la falta de agua. Francia, Rumania, España, Portugal e Italia probablemente tendrán que hacer frente a una caída de la productividad de los cultivos, sobre todo de los cereales, generada por el estrés hídrico y térmico”, alerta el informe.

En la misma línea, un reciente estudio de la consultora agrícola, Strategie Grains, indica que en 2022 la producción de trigo de la UE será de 123,3 millones de toneladas, por debajo de las 124,4 millones pronosticadas en junio y de las 129,9 millones de toneladas cosechadas en 2021.

Por su parte, la cosecha de cebada se situará en 49,6 millones de toneladas, frente a las 50,3 millones calculadas el mes pasado y a las 51,9 millones del año pasado. En la misma línea, se prevé que la producción de maíz descienda a 65,4 millones de toneladas, frente a las 66,8 millones pronosticadas y las 69,7 millones cosechadas en 2021.

"La recurrente escasez de agua y el clima caluroso en muchas zonas de producción están afectando negativamente al potencial de rendimiento", detalla el documento.

En este marco, y con los precios internacionales del trigo con máximos históricos, el mercado mundial de alimentos no encuentra un respiro, luego del impacto de la pandemia y del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. 

Ante el temor de un recrudecimiento de la inseguridad alimentaria a nivel mundial, el director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, David Beasley, advirtió que "49 millones de personas en 43 países ya están llamando a la puerta de la hambruna".