Por Agroempresario.com
El martes 26 de noviembre, la Bolsa de Cereales de Córdoba será el escenario del remate del primer lote de trigo de la campaña 2024/2025, un evento simbólico que oficializa el inicio de la comercialización del cereal en Argentina. Sin embargo, como reporta Ámbito, la campaña ya está en marcha: camiones provenientes del norte del país han comenzado a ingresar al puerto de Rosario con miles de toneladas de trigo, a pesar de los rendimientos inferiores al promedio en varias regiones debido a condiciones climáticas adversas.
Las primeras cosechas provenientes del norte —con provincias como Santiago del Estero, Chaco y Formosa como protagonistas— han enfrentado rendimientos que, según el presidente de Argentrigo, Martín Biscaisaque, “oscilan entre 8 y 10 quintales por hectárea en algunas zonas, reflejando una notable escasez de agua”. En contraste, en el centro-norte de Santa Fe, las cifras son ligeramente mejores, con rindes de hasta 23 quintales por hectárea.
Mientras tanto, el centro y sur de la provincia de Buenos Aires muestran mejores perspectivas gracias a lluvias recientes y un clima fresco que han mejorado las condiciones del cultivo. Fernando Rivara, presidente de la Federación de Acopiadores, destacó a Ámbito que “las últimas lluvias le cayeron muy bien al cultivo para avanzar en el ciclo productivo. En cuanto al sur de Buenos Aires, por ahora viene muy bien”.
La comercialización del trigo también enfrenta un contexto complejo. Según la Bolsa de Comercio de Rosario, las exportaciones declaradas hasta el 30 de octubre alcanzan solo 720.000 toneladas, la cifra más baja en nueve años. Además, los precios internacionales se ven afectados por la política rusa de priorizar su mercado interno, lo que ha deprimido los valores globales.
En el plano local, la expectativa por una posible unificación del tipo de cambio genera especulación en el sector. Como indicó Rivara, “si se libera el tipo de cambio, eso significaría un salto en el precio del trigo. La gente tiene expectativas y está esperando un poco”.
A pesar de estos desafíos, Argentina sigue siendo el principal abastecedor de trigo para Brasil, cuyo rendimiento proyectado fue ajustado a la baja por la consultora Stonex. Según las estimaciones, la cosecha brasileña alcanzará 7,5 millones de toneladas, lo que refuerza la posición estratégica de Argentina como proveedor del mercado regional.
Con una producción esperada de entre 18 y 19 millones de toneladas, y un carry de 2,5 millones, el país tiene como desafío colocar 14 millones de toneladas en los mercados internacionales, un esfuerzo clave para sostener la actividad agrícola.
La campaña de trigo 2024/2025 ya comenzó con luces y sombras, pero las recientes lluvias y la estabilidad del clima auguran mejores resultados en las zonas más productivas del país. El remate simbólico en Córdoba será, como cada año, el puntapié inicial para definir los próximos pasos de un sector que sigue siendo vital para la economía nacional.