Por Agroempresario.com

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina anunció hoy medidas preventivas tras la confirmación de un brote de fiebre aftosa en Alemania. Este foco, detectado en tres búfalos de agua en el estado de Brandeburgo, encendió las alarmas sanitarias a nivel mundial.

En respuesta, el SENASA suspendió de manera inmediata las importaciones de productos animales que podrían transmitir el virus, tales como semen bovino, productos y subproductos de rumiantes, porcinos y caza provenientes de Alemania. La suspensión también abarca productos certificados como libres de fiebre aftosa, lo que subraya el compromiso de Argentina con la protección de su estatus sanitario.

El brote, que fue notificado por el Ministerio de Agricultura alemán a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), generó una serie de medidas de contención dentro del país afectado, incluyendo la delimitación de zonas de protección y vigilancia, así como la prohibición del movimiento de animales desde el área afectada.

La fiebre aftosa es una enfermedad viral altamente contagiosa que representa una grave amenaza para la producción ganadera. Por ello, el SENASA ha intensificado los controles en las fronteras terrestres, puertos y aeropuertos argentinos para evitar la entrada del virus. Estas medidas son parte de la estrategia nacional para asegurar que Argentina, reconocida por su alta calidad y seguridad alimentaria, mantenga su liderazgo en la exportación de productos ganaderos.

El SENASA también solicitó a las autoridades alemanas información epidemiológica detallada sobre el brote, lo que permitirá evaluar la situación y definir las acciones a seguir. La reanudación de las importaciones dependerá de la evolución del brote y de la confirmación oficial de la OMSA sobre la erradicación de la enfermedad en la región afectada.

Este es el primer caso de fiebre aftosa registrado en Europa desde 2011, y el primero en Alemania desde 1988, lo que destaca la gravedad de la situación y la necesidad de tomar medidas preventivas para proteger al sector agropecuario argentino.

Las autoridades alemanas también han activado su Equipo Central de Gestión de Crisis para mitigar el impacto en las industrias agrícola y alimentaria, mientras el SENASA sigue de cerca el desarrollo de los acontecimientos.