Por Agroempresario.com
En el marco del III Congreso Federal “Argentina Agrega Valor en Origen / Cumbre Mundial de la Bioeconomía”, organizado por Agroempresario.com y realizado el pasado 25 de agosto en el Hilton Hotel de Puerto Madero, Peter Neven, Jefe de Asuntos Económicos de la embajada de Alemania en Argentina, presentó una visión integral sobre la bioeconomía, sus oportunidades globales y su relevancia estratégica para la cooperación internacional, especialmente con nuestro país.
Durante su exposición, Neven enfatizó que la bioeconomía no es un tema de nicho, sino una disciplina transversal que conecta la producción primaria con otros sectores económicos y redefine la manera de generar alimentos, energía, materiales y servicios a partir de recursos renovables.
“La bioeconomía es un tema que va a ser decisivo en las próximas décadas para lograr la armonización entre economía, sociedad y medio ambiente”, aseguró Neven, destacando la importancia de una transición sostenible hacia una economía circular.
Según Neven, la bioeconomía implica alejarse de los recursos fósiles y apostar por materias primas renovables, incluyendo residuos agrícolas, biomasa forestal y productos acuáticos. Este enfoque genera nuevas oportunidades de ingresos, empleo y desarrollo regional, fortaleciendo la resiliencia de las economías locales y fomentando un consumo responsable.
La estrategia alemana se estructura en tres dimensiones clave:
Neven destacó que la bioeconomía abre nuevas cadenas de valor y mercados para productos como bioplásticos, materiales de construcción y alimentos de base biológica, impulsando la innovación en sectores como la agricultura, alimentación, química y energía.
En 2020, el Gobierno federal alemán publicó la Estrategia Nacional de Bioeconomía, una hoja de ruta que busca sistematizar el aprovechamiento sostenible de los recursos biológicos a lo largo de toda la cadena de valor, desde el cultivo hasta la comercialización.
Entre sus objetivos principales se encuentran:
“La bioeconomía no es un proyecto exclusivamente nacional. Las cadenas de materias primas, los flujos comerciales y los desafíos ecológicos son globales. La cooperación internacional es decisiva para encontrar soluciones a retos como la seguridad alimentaria y el cambio climático”, subrayó Neven.
Neven destacó la cooperación de Alemania con países como Uruguay y Argentina, así como su participación activa en organismos internacionales como OCDE, FAO y la Unión Europea, para consolidar una bioeconomía sostenible globalmente.
Entre los proyectos mencionados se incluyen:
“La bioeconomía sostenible es un proyecto global colectivo que solo puede tener éxito si se integran justicia social, política ambiental y económica”, enfatizó el representante alemán.
En la última edición del Global Forum on Food and Agriculture (Berlín), la bioeconomía fue eje central del debate. Neven destacó que las conclusiones del foro resaltan la importancia de la bioeconomía para la seguridad alimentaria global, especialmente para pequeños productores y productoras, permitiendo:
“El interés alemán en colaboración con países agrícolas como Argentina es especialmente alto, dado el potencial de innovación y los valiosos recursos naturales disponibles”, señaló Neven, destacando oportunidades conjuntas en investigación y desarrollo de tecnologías bioeconómicas.
Peter Neven enfatizó que la bioeconomía no solo requiere recursos renovables, sino también innovación tecnológica, digitalización y biotecnología. La integración de estas herramientas permite:
La transición hacia la bioeconomía implica un cambio cultural y económico: abandonar modelos basados en recursos fósiles, reducir residuos y promover la economía circular. Según Neven, esto es fundamental para:
“La bioeconomía conecta innovación, sostenibilidad y competitividad. Avanzar por este camino es el interés de todos nosotros”, aseguró el representante alemán.
Neven también destacó la importancia de educar y concienciar a la sociedad sobre las oportunidades y beneficios de la bioeconomía, fomentando la aceptación social y la participación ciudadana en políticas sostenibles.
El representante alemán identificó un gran potencial de cooperación con Argentina, dado su liderazgo agrícola y disponibilidad de recursos naturales. La bioeconomía puede ofrecer soluciones para:
“La cooperación entre Alemania y Argentina puede construir una economía sostenible, resiliente e innovadora, no solo para regiones individuales, sino para todo el mundo”, concluyó Neven.
En su intervención, Neven resumió tres ideas centrales:
Neven subrayó que la bioeconomía genera nuevas oportunidades de empleo, especialmente en zonas rurales, fortaleciendo la economía local y fomentando la industrialización sostenible. La diversificación de productos bio-basados y la creación de mercados internacionales contribuyen a la resiliencia económica y climática de las regiones.
La presentación de Neven reafirma el rol de la bioeconomía como estrategia global de desarrollo, conectando sostenibilidad, innovación y competitividad. Alemania demuestra liderazgo a través de su Estrategia Nacional de Bioeconomía, cooperación internacional, proyectos piloto y transferencia tecnológica, y muestra un interés particular en trabajar con Argentina y países agrícolas para impulsar soluciones innovadoras y sostenibles a nivel mundial.
“La bioeconomía no es una visión lejana, sino un proceso dinámico que requiere colaboración, innovación y responsabilidad compartida. El futuro sostenible del planeta depende de cómo gestionemos nuestros recursos naturales hoy”, concluyó Neven ante los asistentes del congreso.