Por Agroempresario.com
La incorporación de la inteligencia artificial generativa en el ámbito financiero está marcando un punto de inflexión en la manera en que las organizaciones manejan sus operaciones. Según un artículo reciente de El Cronista, esta transformación tecnológica plantea tanto oportunidades como desafíos, especialmente para los CFOs que buscan mantener la competitividad en un mercado en constante cambio.
Uno de los obstáculos más destacados es la escasez de talento especializado en IA generativa. A pesar del creciente interés en estas herramientas, muchos líderes financieros expresan su preocupación por la falta de experiencia en el uso de la tecnología. “El 65 por ciento de los encuestados en la encuesta North American CFO Signals™ del primer trimestre de 2024 de Deloitte citó las habilidades técnicas de IA generativa como una de sus principales preocupaciones”, se menciona en el artículo. Esta carencia de habilidades no solo puede frenar la optimización de operaciones, sino que también limita el aumento de la productividad en la función financiera.
Además de la necesidad de talento, la colaboración interdepartamental se presenta como un requisito clave. Los CFOs deben reconocer el valor de trabajar en conjunto con otras áreas de la organización para implementar iniciativas de transformación. La agilidad en la respuesta a riesgos y la adaptación a cambios en el entorno de negocios son esenciales. Tal como se indica en el artículo de El Cronista, “la transformación que genera la disrupción requiere una función financiera que opere a toda máquina, analizando rápidamente las amenazas y sus impactos potenciales”.
La ciberseguridad también se erige como un aspecto crítico en la agenda de los líderes financieros. La encuesta de Deloitte señala que “el 76 por ciento de los encuestados considera la ciberseguridad como una de las tres principales prioridades para sus comités de auditoría”. La colaboración directa entre CFOs y directores de seguridad de la información se vuelve fundamental para gestionar los riesgos emergentes que acompañan a la tecnología disruptiva.
Por último, la necesidad de una estrategia a largo plazo en la reducción de costos es innegable. Los CFOs deben enfocar sus esfuerzos en inversiones estratégicas que generen eficiencia y no solo en recortes inmediatos. Este enfoque proactivo permitirá a las empresas alinear sus objetivos financieros con sus metas estratégicas, contribuyendo al crecimiento sostenible. “Las consecuencias de no hacerlo pueden ser el resultado de centrarse solo en recortar costos, sin tener en cuenta el impacto organizacional más amplio”, concluye el artículo de El Cronista.
En resumen, la integración de la IA generativa en las finanzas presenta un camino lleno de retos, pero también de oportunidades. Los líderes del sector deben prepararse para enfrentar estos desafíos, asegurándose de que sus organizaciones no solo sobrevivan, sino que prosperen en esta nueva era digital.
