Biopek: El packaging biodegradable que transforma la industria de las heladerías y más

Por Agroempresario.com

La sostenibilidad en la industria del packaging está dando un paso importante hacia el futuro con la introducción de Biopek, un material biodegradable que promete cambiar las reglas del juego. Desarrollado por la empresa cordobesa Enpolex, este nuevo producto no solo responde a la creciente demanda de soluciones más ecológicas, sino que también cumple con altos estándares de eficiencia térmica y mecánica, lo que lo convierte en una opción ideal para sectores como las heladerías, el embalaje industrial y la industria farmacéutica.

A diferencia del tradicional telgopor (poliestireno expandido o EPS), que puede tardar siglos en descomponerse, Biopek se biodegrada en menos de cuatro años cuando se encuentra en condiciones de vertederos activos. Este avance promete disminuir considerablemente el impacto ambiental de los productos de packaging que se utilizan en sectores sensibles como el alimentario y el farmacéutico, donde la protección de los productos es esencial.

Enpolex ha logrado un hito al migrar por completo su producción destinada a la industria de las heladerías a esta nueva materia prima. "Este avance no solo transformará el sector de la heladería, sino que también ofrecerá soluciones innovadoras para otras aplicaciones industriales", declaró Mariano Comba, CEO de Enpolex. En colaboración con Styropek y la Asociación Argentina de Poliestireno Expandido (AAPE), la empresa desarrolló Biopek, un material que combina las propiedades técnicas del EPS con una capacidad de biodegradación acelerada.

Según un informe de la firma de investigación Mordor Intelligence, la industria global de envases biodegradables se estima en 105,26 mil millones de dólares en 2024 y podría alcanzar los 140,66 mil millones de dólares en 2029, con una tasa de crecimiento anual del 5,97%. Esta tendencia está impulsada por el aumento de la conciencia ambiental y las políticas gubernamentales que promueven la sostenibilidad. Biopek se enmarca dentro de esta demanda creciente, convirtiéndose en un referente en innovación en packaging ecológico.

A diferencia del EPS tradicional, que se utiliza ampliamente por su eficiencia térmica para la conservación de productos, Biopek mantiene estas características y ofrece una mayor capacidad de biodegradación. Esta propiedad, que cumple con los estándares internacionales ASTM 5511, permite que el material se descomponga de manera más rápida y eficiente en vertederos activos, reduciendo así el tiempo que tarda en volver al entorno natural.

Además de su capacidad biodegradante, Biopek ha sido aprobado por el SENASA para aplicaciones alimenticias y médicas. Esto lo hace seguro para el transporte y embalaje de alimentos y medicamentos, sin los riesgos asociados con productos que contienen sustancias químicas como BPA y ftalatos. Su seguridad y versatilidad permiten su aplicación en diversas áreas, desde la heladería hasta el transporte de medicamentos y el embalaje industrial.

Enpolex ha comenzado a producir toda su línea de productos para la industria de las heladerías en Argentina con Biopek, con planes de expansión hacia otros mercados. La empresa no solo busca consolidarse como un líder en soluciones de packaging biodegradables en el país, sino también como un referente global. La adaptabilidad de Biopek abre nuevas oportunidades en sectores que aún no han explorado el potencial de este material, como el embalaje de productos farmacéuticos y el transporte de medicamentos sensibles.

A largo plazo, Enpolex planea explorar nuevas aplicaciones de Biopek en mercados internacionales, destacando la importancia de seguir innovando y ofreciendo soluciones sostenibles que puedan transformar diversas industrias. "Nuestro objetivo es la adopción de Biopek a gran escala, lo que no solo beneficiará a las empresas, sino también al medio ambiente", concluyeron desde Enpolex.

Con el creciente impulso hacia una mayor sostenibilidad, Biopek se posiciona como una de las soluciones más prometedoras para enfrentar los desafíos ambientales que plantea la industria del packaging.