YPF anuncia la construcción de su planta de GNL en Río Negro: Kicillof acusa al Gobierno Nacional de influencia política

Por Agroempresario.com

En una reciente y sorprendente decisión, YPF ha optado por ubicar su nueva planta de Gas Natural Licuado (GNL) en Río Negro, en lugar de en la Provincia de Buenos Aires. La inversión para este ambicioso proyecto supera los 30.000 millones de dólares, marcando una de las mayores inversiones en infraestructura en el país. La noticia ha generado un fuerte enfrentamiento político, con el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, responsabilizando al presidente Javier Milei por la decisión.

Kicillof, en una conferencia de prensa, ha acusado a Milei de influir en la elección del sitio para la planta debido a su vínculo con los directivos de YPF, quienes, según el gobernador, son funcionarios afines al presidente. El gobernador sostiene que la elección de Río Negro no tiene relación con la falta de adhesión de Buenos Aires al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) de la Ley Bases, como se había sugerido en algunos círculos. Kicillof asegura que esta afirmación ha sido desmentida por el propio CEO de YPF, Horacio Marín, en una conversación telefónica reciente.

La decisión de construir la planta en el puerto de Punta Colorada, en Sierra Grande, Río Negro, se produjo después de semanas de incertidumbre y competencia entre ambas provincias por asegurar la inversión. Kicillof califica el giro en la elección como "intempestivo" y "sorpresivo", destacando que se habían estado preparando para este proyecto en Buenos Aires durante una década.

El gobernador no ha dudado en calificar la decisión de "venganza política" por parte del gobierno nacional, argumentando que Milei ha tomado esta medida como respuesta a la pérdida electoral en Buenos Aires. Además, Kicillof ha criticado al gobierno por retirar fondos para diversas áreas provinciales, como salarios docentes y transporte, como parte de una estrategia para perjudicar a la provincia.

En su declaración, Kicillof exigió que Marín confirme públicamente que la elección del sitio para la planta no estuvo influenciada por la adhesión al RIGI, e instó a los medios a consultar al CEO de YPF para obtener una aclaración oficial.

Esta noticia ha intensificado el conflicto entre el gobierno de Buenos Aires y la administración nacional, revelando profundas divisiones políticas en el país. La decisión de YPF, que también contará con la colaboración de la petrolera malasia Petronas, sigue generando debate y tensión en la arena política.