Soja: ROSARIO
$280.000 0.00%
Maíz: ROSARIO
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Trigo: ROSARIO
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Por Agroempresario.com
Las lluvias generalizadas que se registraron en octubre lograron revertir la angustia que atravesaban los productores agrícolas argentinos, golpeados por la sequía. Con más del 80% de la superficie agrícola en estado crítico, la situación parecía desbordarse, afectando los rendimientos de trigo y demorando la siembra de maíz. Sin embargo, la llegada de las precipitaciones dio un giro inesperado.
Según reportó La Nación, Cristian Russo, jefe de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), expresó: “Ya la mitad del cereal [por el trigo] estaba de regular a malo en la región y las lluvias llegaron en un momento justo para parar las pérdidas, aprovechar estos milímetros para el llenado y sostener los rindes”.
Además, Juan Pablo Ioele, asesor de productores en Córdoba, señaló que “estas precipitaciones salvaron la siembra de maíz de primera, que había avanzado lentamente por la falta de agua”. A pesar de haber quedado fuera de la ventana óptima en algunas zonas, se logró sembrar la mayor parte del maíz proyectado. “Se pudo hacer un poco tarde quizás, pero casi todo quedó sembrado”, puntualizó Ioele
Este cambio de panorama beneficia especialmente al trigo, cuya etapa final podrá desarrollarse sin más retrocesos, y da lugar al inicio firme de la siembra de soja, otro de los cultivos clave para la economía agroexportadora. “Estamos justo al comienzo de la fecha de siembra de soja, y estas lluvias proporcionan la humedad suficiente para empezar con buenas expectativas”, explicó Ioele.
En Santa Fe, José Luis Roca, productor de Bigand, celebró la abundancia de las lluvias: “Llovió bien, 100 milímetros la semana pasada y ahora otros 100. Se había sembrado algo de maíz que no estaba naciendo bien, pero ahora empezaremos con la soja. Si las condiciones se mantienen, esperamos buena cosecha de trigo”.
Por su parte, Cecilia Conde, de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, resaltó que estas precipitaciones también mejorarán las condiciones del perfil del suelo para las labores de fertilización necesarias en maíz y soja, esenciales para mantener los niveles de rendimiento esperados.
Según las estimaciones iniciales compartidas por el analista Gustavo López, de la consultora Agritrend, Argentina podría alcanzar una cosecha total de 137 millones de toneladas de granos este ciclo, un crecimiento respecto a los 129 millones obtenidos el año pasado. Aunque este número dista del récord de 142 millones de toneladas de la campaña 2018-2019, representa una señal positiva para el sector.
“Con 18 millones de toneladas de trigo y un rendimiento en soja que podría llegar a 54 millones de toneladas, el panorama es alentador, aunque los precios internacionales siguen siendo una preocupación para los productores”, explicó López en la nota publicada por La Nación.
Aún así, los especialistas advierten que el clima deberá seguir acompañando en los próximos meses. Nicolás Udaquiola, director de AZ-Group, destacó: “Las lluvias trajeron tranquilidad momentánea, pero deberemos seguir recibiendo precipitaciones hasta febrero para asegurar una buena campaña”.
Con las primeras siembras de soja en marcha y la recuperación de los cultivos de maíz y trigo, la campaña agrícola se encamina hacia una recuperación productiva, vital para la economía argentina. Si bien la incertidumbre persiste, los productores miran hacia adelante con renovada esperanza y esperan que este impulso se mantenga.
