Batalla por la presidencia de la FAA: Omar Barchetta y Andrea Sarnari se perfilan como los principales candidatos

Por Agroempresario.com

A menos de un mes para la elección del nuevo presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Omar Barchetta y Andrea Sarnari se destacan como los principales aspirantes al liderazgo de la entidad. La decisión se tomará durante el Congreso Anual Ordinario que se llevará a cabo el 26 y 27 de septiembre, donde los 27 delegados de la FAA elegirán a su nuevo líder para los próximos dos años.

Andrea Sarnari, quien ha estado profundamente vinculada con la FAA desde joven, destaca por su amplia trayectoria dentro de la organización. "Toda mi vida pasó por adentro de la historia de la Federación Agraria, es mi segunda casa", declaró Sarnari en una entrevista con La Nación. Su experiencia incluye roles clave como presidenta de la Fundación de FAA, síndica y directora nacional. En su candidatura, Sarnari aboga por una renovación dirigencial que adapte la FAA a los cambios actuales del sector agropecuario. “No es algo que estuvo dentro de mis proyecciones ser presidente, lo tomo como una responsabilidad de poder representar a muchos compañeros federados”, afirmó.

Por otro lado, Omar Barchetta llega a la contienda con una sólida trayectoria en la producción agropecuaria y el gremialismo. Ha ocupado diversos cargos en la FAA, incluyendo secretario de Finanzas y vicepresidente primero. Su visión se centra en la defensa de los pequeños y medianos productores, así como en la adaptación a nuevas tecnologías y el acceso a créditos. En conversación con La Nación, Barchetta destacó que su objetivo es “defender los intereses y derechos de los pequeños y medianos productores” y subrayó la importancia de que los productores puedan acceder a herramientas modernas y seguros contra inclemencias climáticas.

Ambos candidatos están trabajando arduamente para conseguir el respaldo necesario de los socios de la FAA en un momento crítico para la entidad. La elección no solo determinará el futuro liderazgo de la FAA, sino que también podría marcar un cambio significativo en la forma en que la organización enfrenta los desafíos actuales del sector agropecuario.